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programa de llegada al espacio con
fines soberanos, sino también de la
transformación de la Argentina, de
los pueblos, de las universidades, de
la repatriación de científicos. Sería
injusto no mencionar que es gracias
a un proyecto político sustentado en
una idea de Estado presente, hoy
conducido por Cristina Fernández
de Kirchner.
No sólo hablamos de la fabricación
de cohetes lanzadores de satélites,
sino también de la fuerte inyección
de recursos y generación de trabajo
a las economías locales. Para que se
pueda dimensionar, son altísimos los
porcentajes de inversión de este pro-
yecto anualmente en el presupuesto
local, lo cual, de algún modo, regula
toda la vida de los ciudadanos. En la
base de lanzamiento de Capetina, por
ejemplo, los puntaindienses ocupan
puestos de seguridad y llevan ade-
lante tareas generales y de limpieza.
Lo que antes era un camino de fango
y bajos hoy es una verdadera base,
con casi 20 hectáreas, con Pads de
distintos tamaños y calles internas.
En esas tareas los prestadores loca-
les, con camiones y maquinarias,
recuperaron trabajo, con tendido de
electricidad a través de cooperativas
eléctricas de la zona, reacondicio-
namientos y realización de nuevos
caminos, y construcción de edificios
para logística en el lugar.
Con la comunidad
De nada sirve construir un proyecto
de esta magnitud sin los vecinos, sin
la comunidad universitaria, en defini- cuando el Vehículo Experimental VEX
OPINIÓN tiva, sin los argentinos.
Las reiteradas visitas del inge-
niero Actis a Punta Indio habla de
un decano pensando en su región,
saliendo de lo estrictamente acadé-
mico y universitario para poner los
pies en la tierra y en el tiempo en
que vive. De mucha utilidad fue su
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reciente visita para hablar del “Rol
del Estado en el Desarrollo Local”.
También, junto al ministerio de Pla-
nificación, llevamos adelante charlas
y conferencias en los distintos nive-
les de nuestras escuelas, y la CONAE
realiza visitas en algunas ocasiones.
En el mismo sentido, se construyó
el Stand del Polo Espacial de Punta
Indio, que es visitado por miles de
bonaerenses y argentinos a través de
la ruta 36, camino a la Costa Atlán-
tica, en Pipinas.
La Patria es el otro y Pipinas
El pasado 9 de julio tuve ocasión de actual Polo Espacial.
compartir con los vecinos de Pipinas
el acto del Día de la Independencia.
Lo cual me dejó una reflexión que
tiene que ver con la idea de Patria,
la que heredamos y la que esta-
mos construyendo en este tiempo.
Son tres los momentos con los que
quiero graficar lo que es el Tronador
II para nuestra tierra, en especial,
para Pipinas.
En la oportunidad de asumir como
intendente municipal, el 10 de diciem- mucho más que un logro científico.
bre de 2011, mi primer acto fue en
esta localidad, por su aniversario. A
tres días de ese evento, sin saber aún un Tronador, sentimos que esa es la
cómo, planteé la necesidad de rom-
per con la nostalgia y la tristeza de
lo que había sido el pueblo, de aque-
lla chimenea que ya no humeaba y
estaba ahí expectante.
El otro momento, aquella tarde del
15 de agosto de 2014 en Pipinas,
1B concretó su trayectoria progra-
mada, volando durante 27 segundos
y llegando a una altura máxima de
2200 metros.
Por último, la visita del ministro
Julio De Vido para hacer entrega
de la llave del actual Polo Espacial,
donde estaba aquella cementera que
había sido comprada por la firma
Loma Negra en los años 90 y luego
fue cerrada.
Esos hechos representan un des-
pertar, con un profundo sentimiento
de Patria. Se trata de un día, un
tiempo, que vino a revertir esos
años de desolación y cierre de pue-
blos enteros. Literalmente, esa llave
vino a dar fin a un candado oxidado,
cambiarlo por la Patria Soberana,
de ciencia y tecnología. Remarco
esto porque hoy, a los ojos de los
pipinenses, es volver a ver hom-
bres y mujeres de casco, overol y
borceguíes cada mañana entrando
y saliendo de la fábrica, eso es el
Por eso decimos en muchas oca-
siones que la Patria es el Otro. Es ese
vecino que recuperó sueños, trabajo
y expectativas. Si se entiende de
ese modo, claramente se ve cuál es
nuestro rol. Son esos recursos que
se usan para el otro, para nuestro
pueblo. Es un Estado presente el que
puede cambiar el destino de un pue-
blo. Es importante reflexionar sobre
estos proyectos, que representan
Cada vez que vemos un Pipinas,
patria. Que cada uno hacemos patria
desde el lugar que ocupemos: como
científicos, obreros, vecinos, aca-
démicos, investigadores. Este es el
verdadero impacto del Tronador II en
Punta Indio.
* Intendente de Punta Indio.